¿Por qué es mejor dividir el BARF en dos comidas al día?
La pregunta sobre cuántas veces debe comer un perro al día es común entre los dueños responsables. Algunos optan por una sola comida abundante, otros prefieren varias porciones pequeñas. La respuesta correcta depende en gran medida de qué alimento recibe el perro. Y es que el BARF (Biológicamente Apropiado Crudo) se digiere de forma muy diferente al croquetado.
Diferencias en los tiempos de digestión
Un punto clave es el tiempo que tarda el sistema digestivo del perro en procesar una comida. El BARF está compuesto de carne fresca, vísceras, huesos y vegetales. Estos ingredientes crudos son fáciles de descomponer por los jugos gástricos y enzimas del perro. Por eso, una ración de BARF suele estar completamente digerida en un máximo de ocho horas.
Con el croquetado la situación cambia: las croquetas se inflan en el estómago, están altamente procesadas y contienen aditivos que ralentizan la digestión. Puede tomar hasta 18 horas para que una comida de croquetas se procese por completo. Durante todo ese tiempo, el sistema digestivo del perro sigue trabajando sin descanso.
Por qué dos comidas de BARF tienen sentido
Dado que el BARF se digiere relativamente rápido, lo ideal es dividir la ración diaria en dos porciones: una a media mañana y otra a primera hora de la tarde-noche. De esta forma el perro disfruta de dos momentos de comida al día sin sobrecargar su sistema digestivo. Al mismo tiempo, durante la noche se genera un ayuno de al menos 14 horas, lo cual permite que el estómago y los intestinos descansen por completo.
Esta pausa nocturna no solo beneficia al sistema digestivo, sino también a todo el organismo. El cuerpo aprovecha esos momentos de descanso para activar procesos de reparación, eliminar células dañadas y fortalecer el sistema inmunológico. Darle estas pausas al perro es una manera natural de promover su salud a largo plazo.
Por qué el croquetado debería darse solo una vez al día
Con las croquetas ocurre lo contrario. Como permanecen tanto tiempo en el aparato digestivo, darle varias comidas al día significa que el perro casi nunca tendría un verdadero descanso digestivo. Por eso, en la mayoría de los casos, una sola comida de croquetas al día es suficiente.
La parte psicológica
Está claro que comer no es solo ingerir alimento, también es un momento de placer y satisfacción para el perro. El BARF, con su olor y textura, estimula el comportamiento natural de alimentación. Dos comidas al día representan un buen equilibrio: cumplen las necesidades fisiológicas y al mismo tiempo ofrecen al perro un ritual diario que contribuye a su bienestar emocional.
Conclusión:
- BARF: Dos comidas al día – una a media mañana y otra al final de la tarde – favorecen la digestión, dan al organismo el tiempo de descanso necesario y ofrecen al perro satisfacción psicológica.
- Croquetas: Una sola comida al día es suficiente, ya que la digestión es mucho más lenta y el intestino necesita esas pausas.
De esta forma, la alimentación se ajusta a la dieta elegida y el perro gana en salud física y emocional.
